¿Qué es la Hipertensión Pulmonar?
La hipertensión pulmonar es un tipo de presión arterial alta que afecta a las arterias de los pulmones y al lado derecho del corazón. En una forma de hipertensión pulmonar, llamada hipertensión arterial pulmonar, los vasos sanguíneos de los pulmones se estrechan, bloquean o destruyen. El daño ralentiza el flujo sanguíneo a través de los pulmones y aumenta la presión arterial en las arterias de los pulmones. El corazón debe hacer un esfuerzo mayor para bombear sangre a través de los pulmones. Con el tiempo, el esfuerzo adicional hace que el músculo cardíaco se debilite y falle.
En algunas personas, la hipertensión pulmonar empeora lentamente y puede poner en riesgo la vida. Aunque no existe cura para algunos tipos de hipertensión pulmonar, el tratamiento puede ayudar a reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida.
El corazón común tiene dos cavidades superiores (aurículas) y dos cavidades inferiores (ventrículos). Cada vez que la sangre pasa por el corazón, la cavidad inferior derecha (ventrículo derecho) bombea sangre a los pulmones a través de un vaso sanguíneo grande (arteria pulmonar).
En los pulmones, la sangre librera el dióxido de carbono y toma el oxígeno. Por lo general, la sangre fluye a través de los vasos sanguíneos en los pulmones (arterias pulmonares, capilares y venas) hacia la parte izquierda del corazón.
Sin embargo, los cambios en las células que recubren las arterias pulmonares pueden hacer que las paredes de las arterias se vuelvan más rígidas y gruesas. Estos cambios pueden hacer más lento el flujo sanguíneo o bloquearlo a través de los pulmones, y provocar hipertensión pulmonar.
La hipertensión pulmonar se clasifica en cinco grupos, según la causa.
En casos poco frecuentes, la causa de la hipertensión pulmonar se desconoce. En este caso, la afección se conoce como hipertensión arterial pulmonar idiopática (HPI). Idiopática significa que la causa de una enfermedad no se conoce. La HPI afecta más a las mujeres que a los hombres.
Si la hipertensión pulmonar es causada por un medicamento o por una afección conocida, se denomina hipertensión pulmonar secundaria.
La hipertensión pulmonar puede ser causada por:
- Enfermedades autoinmunitarias que dañan los pulmones, como la esclerodermia o la artritis reumatoidea
- Anomalías congénitas del corazón
- Coágulos sanguíneos en el pulmón (embolia pulmonar)
- Insuficiencia cardíaca
- Enfermedad de las válvulas del corazón
- Infección por VIH
- Niveles bajos de oxígeno en la sangre durante un largo tiempo (crónico)
- Enfermedad pulmonar, como EPOC o fibrosis pulmonar o alguna otra afección pulmonar severa y crónica
- Medicamentos (por ejemplo, ciertos fármacos para adelgazar)
- Apnea obstructiva del sueño